Ir al contenido principal

Entradas

Los aviones siempre vuelan en círculos.

Créeme que lo he intentado todo. Borrar tu número de contacto, tu dirección, tu correo y hasta he borrado nuestra isla del mapa pero joder, ¿cómo le digo a mi loca cabecita que te saque de ahí? No creo que me haga mucho caso, ella siempre tan a su bola, en su burbuja. Créeme cuando te digo que todo esto es un sueño y que nunca despertaré hasta que llegue mi príncipe azul. ¡Bah! Soy más de unicornios. Todo esto no son más que palabras escritas en una noche de tequila y descontrol. El tuyo.
Entradas recientes

Aquel sitio donde solíamos jugar.

No, no te preocupes, esto no es una declaración de amor o una pedida de mano, de verdad, ni por asomo. No te asustes, capullo. Todo está en constante movimiento; los aviones, los colibríes, la tierra. Yo no. No puedes decidir por mí cuando no lo consigo hacer ni yo mismo. El corazón siempre le gana a la razón y lo sé, es una putada, cariño. Lo siento.

Un día desprevenido.

No me gusta la calor pero tampoco el frío cuando no estás tú. Los días largos y las horas que duran días. La gente ignorante y estúpida, que no es lo mismo que "estrupida". Los insectos y algunos que se creen serlo.  Odio aquel 11 de diciembre y aquella noche de 2 de octubre. Odio las guerras pero no las de tu cama. Odio cualquier sonido que no sea tu risa. Todo aquello que me provoca náuseas. Pero me gusta el chocolate hasta vomitar.

Cualquier libro de la estantería es poesía.

Una habitación vacía en donde se encuentran dos cuerpos y muchos libros. Ese lugar mágico al que nosotros llamamos casa. Nuestra isla. No encuentro la manera de despertar, aunque me niego en rotundo. Si no llegas tarde despiértame, vamos a soñar.

Pequeña musa con mucha magia.

El día más feliz de mi vida estaban ellos, él y muchas risas. No podía faltar un par de cervezas y más que una lágrima de felicidad.  Nos dieron las seis a él y ami gracias a ti, a vosotros.  A veces los sueños se hacen realidad.  Nunca olvides que nunca te olvido.

Negras golondrinas.

El 75% de mi vida la paso soñando el otro 25% durmiendo. Todo lo demás no está, no hay nada solo fantasmas y mucho polvo. Todas las golondrinas han emigrado a otra parte del país. Yo nunca he emigrado porque mi casa está aquí. Contigo.

Una canción que lleva tu nombre.

Sonrío a través de un espejo sin cristal. Lloro desconsoladamente hasta que me dan las seis. Mi estómago y mis brazos son pequeñas hormigas hambrientas que se comen entre ellas. Mi cabeza y mi corazón son dos partes que llevan años enfrentadas al igual que yo conmigo. Desde que no estás vivo en constante invierno aunque afuera sea verano. Me siguen gustando los tulipanes rojos y tus camisas horteras. No olvido escribirte porque siempre eres.